TODOS LOS MIÉRCOLES , UNA NUEVA ENTREGA

miércoles, 4 de diciembre de 2024

HELÉNIDES DE SALAMINA. Un maestro especial

 

Como homenaje a los maestros que me siguen y a todos con los que  he trabajado, contamos hoy esta historia tan peculiar. 

D. Ángel Rodríguez Campos. Maestro Nacional en Casar de Cáceres desde 1913 hasta su fallecimiento en 1956. Nació en el pueblo salmantino de Mogarraz el 28 de julio de 1884 (España). Huérfano de padre, se aseguraba que perdió a su madre a los 7 años, muriendo al lado del hijo en un colchón en el suelo. Su única hermana entró en un convento de clausura en Salamanca, y él fue enviado a un seminario, en donde causó asombro su capacidad con el latín y el griego. Con 14 años ya componía versos latinos con rara perfección, llamando la atención de Marcelino Menéndez Pelayo (1856-1912), a quien le dedicó una poesía. Sin vocación eclesiástica, Ángel Rodríguez hizo caso al consejo de Menéndez Pelayo y estudió en Salamanca la carrera de Magisterio, asistiendo a las clases de griego de Miguel de Unamuno, con el que llegó a cartearse después.


Fue en 1913 cuando llega a Casar de Cáceres (España) como maestro, en donde estuvo 40 años educando a los jóvenes. Creó un grupo de exploradores con sus alumnos, con banda de trompetas y tambores que desfilaban en las fiestas del pueblo y procesiones, con uniforme de color caqui. Prestaba libros a los niños, a los que enseñaba a cultivar un jardín, haciendo de su casa huerto una prolongación de la escuela.


Se hizo muy amigo del párroco Saturnino Martín Moreno, con el que hablaba en griego, latín y francés, y entonces ocurrió que decidió transformarse en Helénides de Salamina y empezó a vestirse de grecorromano. Usaba túnicas de colores que hacía él mismo, calzaba sandalias y sujetaba su media melena negra con una cinta.

Ya aparece de esa guisa en  la fotografías tomada en 1935, en la inauguración del Grupo Escolar León Leal de Casar de Cáceres (Está a la izquierda en la foto, no es el redondeado).

 Helénides de Salamina escribió varios libros de poesías, destacando su gran obra maestra, El Panelenio, que tardó siete años en escribir, consta de 20 libros y 21.000 versos, escritos en tercetos, en los que cuenta la odisea del héroe Teucro hasta que funda Salamanca. 


Hay gente que entonces se empezó a referir a él como 'el maestro loco del Casar'; pero no en el pueblo, en donde era muy respetado. Era atendido por un matrimonio formado por María Sánchez Vivas y Basilio Jiménez Carrero. El matrimonio tuvo seis hijos y él apadrino al cuarto, al que puso su nombre. A su ahijado, a Ángel Jiménez Sánchez le pagó la carrera de Magisterio, como hizo con otros dos discípulos: Nicomedes Martín y Máximo Barrantes.

Su último curso como profesor fue el de 1953-54, y que el 15 de enero de 1956, estando enfermo, pasó a vivir con su discípulo y ahijado Ángel Jiménez, muriendo el 26 de agosto de 1956.

En la siguiente página del NO-DO del 27 de noviembre de 1950, encontramos un reportaje de este singular maestro. Es el primer reportaje del noticiero, la pena es que el sonido se ha perdido.

http://www.rtve.es/filmoteca/no-do/not-412/1487355/

 PARA LOS MÁS CURIOSOS 



Casar de Cáceres honra a su sabio maestro. Ha puesto su nombre a la Universidad Popular y a un Certamen  literario de más de 25 años. Tiene una estatua de bronce que rinde honor a una persona que puede ser considerada, el profesor más curioso que ha dado clase en las aulas de España.


No hay comentarios:

Publicar un comentario