Vamos a hacer un ejercicio de recurrencia para observar como las medidas que parecen arbitrarias tienen un significado o una razón justificada en el pasado.
Si nos fijamos en el ancho de los ferrocarriles (distancia entre los dos raíles) de Estados Unidos podemos decir que es 4 pies y 8,5 pulgadas. Nos preguntamos ¿por qué se usó esa medida? Porque esta era la medida de los ferrocarriles ingleses, y como los americanos fueron hechos por los ingleses, se uso esta medida por cuestión de compatibilidad.
Ahora preguntamos ¿por qué usaban los ingleses esa medida? Porque la empresas inglesas que construían las carrozas antes de que existieran los ferrocarriles, utilizaron las mismas medidas que usaban para fabricar las carrozas. Y ¿por qué las carrozas tenían esas medidas (4 pies y 8,5 pulgadas)? Porque la distancia entre las ruedas de las carrozas deberían ser tal que pudiesen caber en las antiguas calles europeas que tenían esas medidas. Y ¿por qué las calles tenían esas medidas? Porque estas calles fueron abiertas por el Imperio Romano, durante sus conquistas, cuyas medidas estaban basadas en los antiguos carros romanos. Y ¿por qué los carros romanos tuvieron esas medidas? Porque se hicieron teniendo en cuenta el trasero de dos caballos que son los que tiraban de los carros.
Shuttle y los dos tanques propulsores.
Una anécdota final nos sirve como colofón al por qué de algunas medidas. Así nos encontramos, que hace ya unos años, el transbordador orbital norteamericano Shuttle utilizaba dos tanques de combustibles (SRB por Solid Rocket Booster), como propulsores, que eran fabricados por Thiokol en el estado de Utach. Los ingenieros que los fabricaron quisieron hacerlos más grandes, pero tuvieron limitaciones por los túneles de los ferrocarriles en donde serían transportados, ya que éstos tenían sus medidas basadas en el ancho de vía del tren.
Así pues, esos diseños de la ingeniería mundial y tecnología
estuvieron condicionado por el tamaño del trasero de caballo romano.
PARA LOS MÁS CURIOSOS
El transbordador espacial o lanzadera espacial ( Space Shuttle) de la NASA , llamado oficialmente Space Transportation System (STS),"Sistema de Transporte Espacial", fue el único vehículo espacial utilizado para el transporte de astronautas por parte de los Estados Unidos entre 1981 y 2011. Lo más destacable de él es que era parcialmente reutilizable.
La Era del Transbordador Espacial llegó a su fin después de 30 años, desde el primer vuelo (STS-1) el 12 de abril de 1981 por el Columbia hasta el último lanzamiento del Transbordador Espacial (STS-135) por el Atlantis (2011).
Un propulsor de cohete sólido (SRB) es un gran motor propulsor sólido utilizado
para proporcionar empuje en lanzamientos de naves espaciales desde el lanzamiento inicial
hasta el primer ascenso. Muchos vehículos de lanzamiento, incluyendo el
transbordador espacial han utilizado SRB para dar a los vehículos de
lanzamiento gran parte del empuje requerido para colocar el vehículo en órbita.
El transbordador espacial utilizó dos transbordadores espaciales que fueron los motores de propulsor sólido más
grandes jamás construidos y los primeros diseñados para su recuperación y
reutilización. El propulsor para cada motor de cohete sólido en el
transbordador espacial pesaba aproximadamente 500.000 kilogramos.
ANCHO INTERNACIONAL O ANCHO ESTÁNDAR
Desde la década de 1830, con el desarrollo de las primeras locomotoras de vapor modernas se fomentó la difusión en Gran Bretaña del ancho de vía adecuado para sus máquinas (1435 mm (4' 81/2")), diversas vicisitudes históricas llevaron a este ancho a convertirse en el más utilizado en el mundo, pasando a ser conocido como ancho internacional o ancho estándar.
Hoy en día, aproximadamente entre un 55 y un 60 % de las vías férreas del planeta emplean el ancho estándar, y la totalidad de las líneas de alta velocidad construidas en Europa (incluida España), China y Japón, se han realizado en ancho internacional.
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